¿Tienen los autónomos indicios para pensar en un respiro para sus negocios?
El Índice de Precios de Consumo (IPC) ofrece un dato positivo en julio, ya que bajó un 0,5% respecto a junio y recortó tres décimas su tasa interanual, hasta el 1,8%. Las causas están en que la subida de los precios de los medicamentos y la electricidad fueron inferiores a las registradas hace año antes, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Incluso, el Gobierno cree que el IPC podría cerrar el año por debajo del 1%, según el ministro de Economía, Luis de Guindos.
Son noticias que han sido bien acogidas por las organizaciones que agrupan a colectivos de trabajadores autónomos, como la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) que considera que la bajada del IPC y el hecho de que se sitúe por debajo del 2% en tasa interanual es «un respiro para los castigados bolsillos de los españoles» y en particular para los autónomos, según apunta otra organización empresarial, Uatae.
Un “pequeño respiro” según la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae) que, sin embargo, advierte que se mantienen “tensiones inflacionistas” que pueden “rebrotar” en los siguientes meses.
Además, avisa: las subidas en el precio de la electricidad en agosto pueden incidir de manera negativa en la evolución de los precios al final del año.
“Es necesario un escenario donde la inflación se sitúe en niveles más bajos, ya que lo que ocupa el incremento de los precios no lo ocupa la actividad real. Menores precios serían muy necesarios para el repunte del consumo, la puesta en marcha de nuevas actividades y proyectos productivos y para mejorar la evolución del empleo”, según la secretaria general de la organización, María José Landaburu.
Para la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), el dato es «un alivio» en la tendencia alcista de inflación que «sufren los españoles» desde finales de 2012 y el secretario general de la organización, Sebastián Reyna, explica que espera que esta tendencia a la baja se consolide y con ello «mejore algo la capacidad adquisitiva perdida en estos años».
Pero al igual que otras organizaciones, UPTA teme que el IPC anual «se vea afectado al alza» en los próximos meses, debido al incremento en el precio de la luz.
«Sólo estaremos ante un buen dato de inflación cuando no tenga carácter coyuntural, resultado de la disminución de algunos productos y servicios, sino que responda de forma estructural a la realidad económica del país», apunta Sebastián Reyna.
Y es que, ante nuevas subidas de los precios, volverían a producirse ceses o cierres de negocios que, cree “afectarán de forma especialmente aguda a los trabajadores autónomos, el sector más débil y sensible de la economía».
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